El santuario del hogar se desvanece: Netflix, el villano oculto

La habitación más importante de nuestras casas está "desapareciendo". El culpable es Netflix

El fin del salón

El salón, el corazón de muchos hogares, está desapareciendo lentamente. El culpable no es otro que Netflix, el gigante del streaming que nos ha robado innumerables horas de interacción social. En su lugar, nos encontramos con una nueva habitación que está ganando protagonismo: el dormitorio.

El dormitorio como nuevo salón

El dormitorio se ha convertido en el nuevo centro neurálgico de nuestros hogares. Es donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo libre, donde vemos películas, series, leemos y hasta trabajamos. Esto se debe, en gran parte, a la comodidad y accesibilidad que nos ofrecen los dispositivos móviles y los portátiles.

• Comodidad: En el dormitorio, podemos tumbarnos en la cama o recostarnos en las almohadas, creando un ambiente relajado y confortable.


• Accesibilidad: Los dispositivos móviles y los portátiles nos permiten acceder a nuestro contenido favorito en cualquier momento y lugar del dormitorio.

Las consecuencias sociales de la desaparición del salón

La desaparición del salón tiene una serie de consecuencias sociales que deben ser consideradas.

• Disminución de la interacción social: El salón ha sido tradicionalmente el lugar donde reunirse con la familia y los amigos para conversar, jugar y ver la televisión. Su desaparición reduce las oportunidades de interacción social.


• Aislamiento: Pasar mucho tiempo en el dormitorio puede provocar sentimientos de aislamiento y soledad.

Cómo reconquistar el salón

Si estamos preocupados por la desaparición del salón, hay una serie de medidas que podemos tomar para reconquistarlo.

• Establecer un propósito claro: Definir el propósito del salón, ya sea como un lugar para socializar, relajarse o trabajar, ayudará a centrar su uso.


• Crear un ambiente acogedor: La iluminación, los muebles y la decoración pueden transformar el salón en un espacio acogedor y confortable.


• Limitar el uso de dispositivos electrónicos: Establecer límites de tiempo para el uso de dispositivos electrónicos en el salón ayudará a reducir las distracciones y fomentar la interacción social.


• Organizar actividades grupales: Fomentar actividades grupales, como juegos de mesa o noches de cine, en el salón ayudará a atraer a la gente de vuelta a este espacio.

La desaparición del salón es una tendencia creciente que tiene consecuencias sociales significativas. Sin embargo, tomando medidas para reconquistar el salón, podemos restaurar su importancia como el corazón de nuestros hogares y fomentar la interacción social y el bienestar.