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Google Maps ha vuelto a demostrar su utilidad más allá de la navegación. La herramienta de mapas de Google ha sido clave para resolver un asesinato ocurrido en Soria, al pillar al supuesto asesino in fraganti.
El pasado mes de mayo, una mujer fue encontrada muerta en su domicilio de Soria. La víctima, de 45 años, presentaba varias puñaladas en el cuerpo. La investigación policial se inició de inmediato, pero no se localizaron testigos del crimen.
Los investigadores se centraron en el análisis de las cámaras de seguridad de la zona, pero no encontraron ninguna imagen del asesino. Sin embargo, al revisar los datos de Google Maps, los agentes descubrieron algo inusual.
Los datos de Google Maps mostraron que un usuario había estado utilizando la aplicación en la zona del crimen el día y la hora en que se produjo el asesinato. El usuario había estado caminando por la calle donde se encontraba el domicilio de la víctima, y había parado frente al edificio durante varios minutos.
Los investigadores rastrearon la dirección IP del usuario y descubrieron que pertenecía a un hombre de 35 años que vivía en la misma calle que la víctima. El hombre fue interrogado y confesó el crimen.
El asesino, cuya identidad no ha sido revelada, declaró que había matado a la víctima en un momento de ira tras una discusión. El hombre había utilizado un cuchillo de cocina para cometer el crimen, y posteriormente había huido del lugar.
Gracias a los datos de Google Maps, la policía pudo localizar al asesino y detenerlo. El hombre ha sido acusado de asesinato y se encuentra en prisión preventiva.
El caso de Soria ha puesto de manifiesto la importancia de Google Maps como herramienta para resolver crímenes. Los datos de localización de la aplicación pueden proporcionar información valiosa a los investigadores, incluso cuando no hay testigos presenciales.
El caso también ha suscitado preocupaciones sobre la privacidad de los usuarios de Google Maps. Los datos de localización de la aplicación pueden ser utilizados para rastrear los movimientos de las personas, lo que plantea cuestiones sobre el derecho a la intimidad.
