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El Gobierno le pone freno a la publicidad de apuestas ilegales en redes sociales
La lucha contra las apuestas ilegales en Colombia ha dado un nuevo giro: Coljuegos, en alianza con el Centro Cibernético Policial y la multinacional Meta, ha solicitado el bloqueo de 289 perfiles en redes sociales. Entre ellos, destacan nombres como La Liendra, Epa Colombia y Yeferson Cossio, quienes, según la entidad, habrían promocionado rifas, bingos y casas de apuestas sin la autorización estatal.
Marco Emilio Hincapié, presidente de Coljuegos, fue claro: esta medida busca proteger los ingresos fiscales destinados al sistema de salud, que pierde alrededor de 70.000 millones de pesos anuales por actividades ilegales. "Estamos enfrentando por primera vez de manera contundente este flagelo", afirmó, haciendo referencia a las más de 7.600 solicitudes de bloqueo de páginas web ilegales realizadas durante su administración.
Pero, ¿qué llevó a tomar una decisión tan radical? Las redes sociales han servido como plataforma para la promoción de casas de apuestas extranjeras, como 1XBet, que operan sin pagar los derechos correspondientes en el país. Además, influencers y figuras públicas han sido señaladas por organizar rifas y juegos de azar sin cumplir con la normativa vigente, lo que constituye un delito según el artículo 312 del Código Penal. Las sanciones llegar podrían llegar a 100 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
Más allá de los perfiles más conocidos, la solicitud incluye nombres como Marcela Reyes, Karina García y Anthony Cárdenas TV. Además, se investigan 79 perfiles adicionales de personas no identificadas que podrían estar vinculadas a estas actividades.
Esta medida ha generado opiniones divididas: mientras algunos aplauden el esfuerzo por combatir las apuestas ilegales, otros critican lo que consideran una "censura" en redes sociales. Lo cierto es que esta acción refleja un intento por regular un sector que, sin los controles adecuados, afecta gravemente las finanzas públicas y fomenta actividades fuera de la ley.
El llamado de Coljuegos es claro: "Queremos garantizar que los juegos de azar y las rifas se realicen de manera transparente y bajo la legalidad". Por ahora, la pelota está en la cancha de Meta y las autoridades, que decidirán el futuro de estas cuentas.