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La nueva película de animación, El Señor de los Anillos: La Guerra de los Rohirrim, es una precuela de la épica trilogía de fantasía de J.R.R. Tolkien. Sin embargo, esta vez, la Tierra Media se siente muy diferente. La película se asemeja más a la serie de televisión violenta y políticamente cargada Juego de Tronos que a las obras originales de Tolkien.
En La Guerra de los Rohirrim, el reino de Rohan está amenazado por una poderosa fuerza orca. Los jinetes de Rohan, conocidos como los Rohirrim, deben luchar por su supervivencia en un mundo cada vez más oscuro y peligroso.
La película no rehuye retratar la brutalidad de la guerra. Las batallas son sangrientas y despiadadas, con cuerpos desmembrados y gritos de agonía resonando en el campo de batalla. Este nivel de violencia es un alejamiento significativo de las obras de Tolkien, que se centraban más en la aventura y la esperanza.
Además de la violencia, La Guerra de los Rohirrim también explora temas de política y traición. El rey Helm Martillo de Hierro debe navegar por complejas alianzas e intrigas, mientras trata de unir a su pueblo contra una amenaza común.
Los personajes son más complejos y menos claramente heroicos que en las obras de Tolkien. Tienen motivaciones egoístas y ambiciones personales, lo que lleva a tensiones y conflictos dentro del reino de Rohan.
La influencia de Juego de Tronos es evidente en La Guerra de los Rohirrim. La película comparte el mismo enfoque en la violencia realista, las intrigas políticas y los personajes complejos. Sin embargo, también carece de la profundidad y el alcance temático de la serie de HBO.
Mientras que Juego de Tronos exploró temas de poder, ambición y moralidad, La Guerra de los Rohirrim se centra principalmente en el conflicto entre Rohan y los orcos. Como resultado, la película se siente más superficial y menos resonante emocionalmente.
El Señor de los Anillos: La Guerra de los Rohirrim es una precuela decepcionante que se desvía significativamente del espíritu de las obras de J.R.R. Tolkien. Su violencia gráfica y sus intrigas políticas pueden recordar a Juego de Tronos, pero carece de la profundidad y la resonancia emocional de la serie de HBO.
Para los fanáticos de El Señor de los Anillos que esperan una historia que se asemeje a la trilogía original, La Guerra de los Rohirrim es probable que sea una decepción. Sin embargo, aquellos que disfrutan de la violencia y las intrigas al estilo Juego de Tronos pueden encontrarla como una experiencia entretenida, aunque superficial.