Las cicatrices duraderas de la infancia: 7 rasgos reveladores de una crianza infeliz

Las personas que crecieron en un hogar infeliz suelen presentar estas siete características, según la psicología

El hogar es el lugar donde debemos sentirnos seguros, amados y apoyados. Sin embargo, para muchas personas, el hogar es todo lo contrario. Crecer en un ambiente familiar infeliz puede tener efectos duraderos en la persona, tanto en su desarrollo físico como emocional.

7 características comunes de las personas que crecieron en un hogar infeliz

1. Baja autoestima

Los niños que crecen en hogares infelices a menudo desarrollan una baja autoestima. Esto se debe a que no reciben el amor y el apoyo que necesitan para sentirse bien consigo mismos. Pueden sentirse poco amados, poco valorados e indignos de amor.

2. Dificultades en las relaciones

Las personas que crecieron en hogares infelices a menudo tienen dificultades para establecer y mantener relaciones sólidas. Es posible que no hayan aprendido cómo relacionarse con los demás de manera saludable, y es posible que tengan miedo de la intimidad o que la saboteen.

3. Problemas de salud mental

Las personas que crecieron en hogares infelices tienen un mayor riesgo de desarrollar problemas de salud mental, como ansiedad, depresión e incluso trastorno de estrés postraumático (TEPT). Esto se debe al estrés y al trauma que experimentaron durante su infancia.

4. Comportamientos poco saludables

Las personas que crecieron en hogares infelices a menudo desarrollan comportamientos poco saludables, como fumar, beber en exceso o consumir drogas. Es posible que recurran a estos comportamientos para sobrellevar el dolor y el trauma que experimentaron durante su infancia.

5. Dificultades financieras

Las personas que crecieron en hogares infelices a menudo tienen dificultades financieras. Es posible que no hayan aprendido cómo administrar el dinero, y es posible que hayan crecido en la pobreza o en un hogar inestable.

6. Problemas de apego

Las personas que crecieron en hogares infelices a menudo tienen problemas de apego. Es posible que no hayan aprendido a confiar en los demás, y es posible que tengan dificultades para formar relaciones cercanas.

7. Dificultad para resolver problemas

Las personas que crecieron en hogares infelices a menudo tienen dificultad para resolver problemas. Es posible que no hayan aprendido cómo resolver los conflictos de manera saludable, y es posible que se sientan abrumados por los problemas.

Cómo superar los efectos de una infancia infeliz

Si creciste en un hogar infeliz, es importante saber que no estás solo. Hay muchas personas que han pasado por experiencias similares y han logrado superarse. Aquí hay algunas cosas que puede hacer para superar los efectos de una infancia infeliz:

• Busca ayuda profesional. Un terapeuta o consejero puede ayudarte a procesar el trauma que experimentaste durante tu infancia y a desarrollar estrategias de afrontamiento saludables.


• Conéctate con otras personas que han tenido experiencias similares. Unirte a un grupo de apoyo o conectarte con otros que han crecido en hogares infelices puede ayudarte a sentirte menos solo y a aprender de los demás.


• Cuídate. Practica el cuidado personal, como comer sano, hacer ejercicio y dormir lo suficiente. Esto te ayudará a sentirte mejor física y emocionalmente.


• Sé paciente contigo mismo. Superar los efectos de una infancia infeliz lleva tiempo. Sé amable contigo mismo y no te desanimes si tienes contratiempos.

Crecer en un hogar infeliz puede tener efectos duraderos en la persona. Sin embargo, es importante saber que es posible superar los efectos de una infancia infeliz. Con ayuda profesional, apoyo y cuidado personal, puedes sanar tus heridas y crear una vida feliz y plena.