## **Windows 10 vs. Windows 11: Un adiós a una década de confianza**
Tras una década de utilizar Windows 10 como mi sistema operativo de confianza, ha llegado el momento de despedirme de él. La promesa de Windows 11 de una interfaz más intuitiva, un rendimiento mejorado y nuevas funciones no ha logrado materializarse por completo.
### **Un paso adelante, dos pasos atrás**
Si bien Windows 11 introdujo algunas mejoras notables, como el nuevo menú Inicio y el Explorador de archivos rediseñado, estas ventajas se han visto eclipsadas por una serie de deficiencias. La eliminación de funciones útiles, como la posibilidad de arrastrar y soltar archivos en la barra de tareas, ha generado frustración entre los usuarios experimentados.
### **Problemas de rendimiento**
Los problemas de rendimiento han plagado a Windows 11 desde su lanzamiento. La actualización del sistema operativo ha provocado ralentizaciones notables en algunos equipos, incluso en aquellos que cumplen con los requisitos mínimos. Estos problemas han sido reconocidos por Microsoft, pero aún no se han resuelto por completo.
### **Interfaz confusa**
La nueva interfaz de Windows 11 ha sido criticada por su confusión. El menú Inicio rediseñado y el centro de control son más difíciles de navegar que sus predecesores en Windows 10. Los usuarios han informado de que les lleva más tiempo encontrar y acceder a las funciones y configuraciones que utilizan con frecuencia.
### **Falta de optimización**
Windows 11 no ha sido optimizado adecuadamente para pantallas táctiles. A pesar de la creciente popularidad de los dispositivos de pantalla táctil, el sistema operativo aún se siente como si estuviera diseñado principalmente para su uso con un ratón y un teclado. Esto ha resultado en una experiencia de usuario deficiente para aquellos que prefieren utilizar sus dispositivos con el tacto.
### **El regreso a Windows 10**
Después de experimentar los problemas y frustraciones de Windows 11, tomé la difícil decisión de volver a Windows 10. El sistema operativo más antiguo puede no ser tan moderno como su sucesor, pero es más estable, confiable y, en última instancia, más fácil de usar.
Mi experiencia con Windows 11 ha sido decepcionante. Si bien el sistema operativo tiene el potencial de ser una mejora significativa respecto a Windows 10, sus problemas de rendimiento, interfaz confusa y falta de optimización lo han convertido en una actualización que no vale la pena. Tras 10 años de confianza, me despido de Windows 10 sin que haya cumplido su promesa de una transición sin problemas a una nueva era de informática.
### **Palabras finales**
Para aquellos que aún están indecisos sobre si actualizarse a Windows 11, les recomiendo encarecidamente que consideren los problemas descritos en este artículo. Windows 10 sigue siendo una opción sólida y confiable para la mayoría de los usuarios. Sin embargo, si está dispuesto a esperar a que Microsoft resuelva los problemas de Windows 11, es posible que obtenga una mejor experiencia más adelante.