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La Seguridad Social se prepara para recalcular las cuotas de los autónomos correspondientes al año 2023. Este proceso, que se lleva a cabo anualmente, tiene como objetivo ajustar las aportaciones de los trabajadores por cuenta propia a las bases de cotización reales. Y, en esta ocasión, muchos autónomos se enfrentan a la posibilidad de tener que pagar una cantidad adicional.
El Recargo de Cotización por Ingresos Reales consiste en un ajuste de las cuotas de la Seguridad Social que se realiza anualmente y que tiene como finalidad que los autónomos paguen sus cotizaciones en función de sus ingresos reales, y no de la base de cotización elegida al inicio de la actividad.
De esta forma, se evita que los autónomos coticen por una base inferior a la que realmente les correspondería y se garantiza que reciben las prestaciones que les corresponden en función de sus ingresos.
El recargo se calcula en base a la diferencia entre la base de cotización elegida por el autónomo y la base real de cotización, que es la que resulta de dividir los rendimientos netos del trabajo entre el número de días del periodo de actividad.
Si la base real de cotización es superior a la base elegida, el autónomo deberá pagar la diferencia más los intereses de demora correspondientes.
La Seguridad Social notificará a los autónomos el importe del recargo en el mes de febrero. A partir de la recepción de la notificación, los autónomos tienen un plazo de 30 días hábiles para realizar el pago del recargo.
Están obligados a pagar el recargo todos los autónomos que hayan tenido ingresos reales superiores a la base de cotización elegida. Sin embargo, existen algunas excepciones, como por ejemplo los autónomos que hayan estado en situación de pluriactividad o los que hayan cotizado por la base mínima durante todo el año.
Para evitar el recargo, los autónomos pueden optar por cotizar por una base de cotización superior a sus ingresos reales. De esta forma, se asegurarán de que están pagando las cotizaciones adecuadas y evitarán tener que pagar el recargo en el futuro.
También es importante tener en cuenta que la base de cotización se puede modificar en cualquier momento. Por lo tanto, si los ingresos del autónomo cambian significativamente, es recomendable modificar la base de cotización para ajustarla a los ingresos reales.
Si recibes una notificación de recargo, es importante revisarla cuidadosamente y comprobar si estás de acuerdo con el importe del recargo. Si no estás de acuerdo, puedes presentar una reclamación ante la Seguridad Social.
Si estás de acuerdo con el importe del recargo, puedes realizar el pago mediante transferencia bancaria o domiciliación bancaria. También puedes fraccionar el pago en hasta 6 plazos, sin intereses.
El recargo de cotización por ingresos reales es un ajuste que la Seguridad Social realiza anualmente para garantizar que los autónomos pagan sus cotizaciones en función de sus ingresos reales. Si tienes ingresos superiores a la base de cotización elegida, es probable que tengas que pagar el recargo. Para evitarlo, puedes optar por cotizar por una base superior a tus ingresos reales o modificar la base de cotización si tus ingresos cambian significativamente.
